Visto en Boadilla de Ríoseco
(Tierra de Campos, Palencia)
Oveja Churra negra busca ferocísimo lobo para lo que surja
Allá donde la tierra no es redonda, sino una infinita planicie, donde el amarillo da buena suerte (y de comer) y donde la puesta de sol es un cine de verano… me encuentro con este escrito.
Nos revela que una oveja, harta de seguir el rebaño, busca aventura con esa clase de locos solitarios que aúllan a la luna. Deja claro que no es como esas cotillas de las “merinas”, sino churra y además negra. Vamos, que nos dice, que aparte de salirse del rebaño de otras churras sin personalidad, encima era la “oveja negra” Denoto hartazgo y ferocidad en su decisión, de ahí que necesite algo similar para escapar juntos bajo ese sol de justicia (porque el sol de Tierra de Campos es juez y parte de toda historia) y vivir aventuras correteando los campos y la vida. Me los imagino sin cardar la lana de nadie ni necesitando esas insoportables casas de los tres cerditos… porque son diferentes, libres de rebaños a los que seguir, alejados de convencionalismos y viviendo la vida para lo que surja…
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